Semana perfecta e inmaculada del Unicaja. No conseguía el equipo dos victorias seguidas en Liga Endesa desde marzo, justo después de ganar la Copa del Rey, pero ha subido varias marchas y ni La Laguna Tenerife ni este domingo el MoraBanc Andorra (98-80) han conseguido pararle. Victoria importante para seguir sumando en el casillero y creciendo en sensaciones antes de poner rumbo directo, ya sí, a la Final Four de la Basketball Champions League.
En transatlántico va a llegar el equipo a Atenas. Acabó siendo un resultado abultado en el homenaje a Joan Plaza, pero lo cierto es que el partido fue una odisea de problemas a superar, especialmente durante la segunda parte. Aunque ahí hay otra gran noticia como es la casi completa disponibilidad de recursos en el momento más importante de la temporada.
Joan Plaza received a beautiful tribute on his return to carpena. / ACBPhoto/M.Pozo
Partido de sustos y soluciones
Cumplió Ibon Navarro con su objetivo porque el equipo volvió a volar sobre la pista y también con su último gran experimento: Dylan Osetkowski como alero. Las últimas lesiones han obligado a recomponer la rotación en las últimas semanas y se ha convertido en una variante más para un jugador capaz de ocupar tres posiciones. Triunfó ante La Laguna Tenerife y este domingo dejó 17 puntos, 5 asistencias, 3 recuperaciones y 18 de valoración.
A partir de ahí, habrá que ver la factura que deja el partido. Olek Balcerowski apenas pudo disputar 4:17 minutos, casi los mejores del curso, y no pudo volver con problemas en la mano. Acabó vendada. Tampoco pudo acabar Kendrick Perry, aunque lo suyo pareció más un golpe en la cadera.
Primera parte en transatlántico
El primer cuarto fue una demostración de fortalezas por parte de ambos equipos. Jerrick Harding comenzó poniendo en aprietos, pero no tardó el equipo malagueño en brillar. Killian Tillie sostuvo ese reto individual (11-13) antes de dar paso a la exhibición coral. Balcerowski secó al Andorra en ataque y en defensa. Le siguió Osetkowski, acertadísimo en el tiro como alero, y lo cerró Perry con un triple sobre la bocina para colocar el 27-16.
Pero el Unicaja estaba a otra cosa y, sobre todo, a otro ritmo. Al ritmo de un equipo que quiere ser campeón en una semana. Por eso el ataque cajista era indetectable. Los cambios parecieron darle al freno y lo paró Ibon Navarro porque el objetivo no era más que seguir. Mantuvo el nivel defensivo el Unicaja y perdió frescura ofensiva (46-32). Hasta que entró Osetkowski. Su rendimiento en el ‘3’ es colosal y le concedió dos mates a Sima para volver a sumar.
Resistencia malagueña
El partido estaba siendo una exhibición de control en los malagueños. Hasta que el Carpena y el equipo entraron en combustión por el arbitraje –27-17 en faltas y 15-35 en tiros libres-. Tyler Kalinoski, por lo pronto, eliminado con 15 minutos por delante. Pero la pista es el sitio en el que mejor se habla en el baloncesto para convertir el 57-44 en un 67-46 con versiones estelares de Tillie y Ejim. Varias desconexiones defensivas, la entrada de Goudou-Sinha y la falta de acierto dejaron el marcador en 69-56.
Y empezó otro partido porque el Andorra dio un paso adelante y el Unicaja alguno que otro atrás. Cuatro minutos tardó el equipo malagueño en encontrar un anotador distinto a Tyson Pérez, mientras que Shannon Evans comenzaba a fluir. Ibon Navarro, por su parte, obligado a colocar a Barreiro como escolta ante los problemas exteriores. Pues fue el gallego el que sentenció el partido con dos triples consecutivos a dos minutos del final (98-80).
Próxima cita: la Final Four
Así que ahora toca darle un pequeño parón a la Liga Endesa para vivir una semana muy importante: la Final Four de la Basketball Champions League. El Unicaja y su afición ya calientan los motores para esa primera cita con el AEK (viernes/20.00 horas) y un público que promete ensordecer el Sunel Arena. Será el primero de los dos pasos a dar en Atenas para reconquistar el trono europeo de la FIBA y sumar el cuarto título a una temporada que ya es historia en Los Guindos.
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