Los teléfonos continuan fuera de servicio en los juzgados de Zamora capital y provincia, y de la Audiencia de Zamora. Más de 72 horas incomunicados, sin poder recibir ni realizar llamadas telefónicas externas ni poder contactar entre oficinas con las extensiones internas, una situación que entorpece el normal funcionamiento de las oficinas judiciales.
El efecto del apagón eléctrico masivo continúa teniendo un alcance significativo para esta Administración que no pudo recuperar hasta mediodía de este miércoles, 30 de abril, los programas informáticos para retomar la plena actividad en las oficinas civiles, penales, el Registro Civil, el Decanato y la oficina común de notificaciones.
Este caos ha estado detrás de “la preocupación de los funcionarios” que se ha vivido en los órganos judiciales de toda la provincia, territorio del Ministerio de Justicia y, por tanto, dependiente de que en Madrid se restablezca el servicio eléctrico por completo. Hasta el mediodía de este miércoles los funcionarios no pudieron tramitar denuncias, demandas, tomar declaraciones, realizar pagos de multas e indemnizaciones y remitir notificaciones a los abogados y los procuradores, entre ellas las sentencias.
Sin programas hasta ayer
Colgados con el apagón se quedaron los programas Minerva, Lexnet y Atenea que permiten dar servicio a la ciudadanía, la acumulación de trabajo mantenía en vilo a los empleados públicos. Estas dificultades explican la declaración el 28 y 29 de abril como días inhábiles para los plazos de trámites judiciales que estableció el Ministerio, mientras algunos empleados públicos optaban por volver al programa Word para ir adelantando las tareas que pudieran para amortiguar el parón informático.
Los juzgados pudieron celebrar ayer juicios, como lo hicieron el martes, porque el programa Fidelius utilizado para grabarlos es el único que se ha salvado de la devacle del apagón, sin problemas ya en todas las salas de vistas. La conexión con otras sedes judiciales para que los testigos presten declaración por vía telemática en los juicios también está activo.
El Instituto de Medicina Legal de Zamora funcionaba con normalidad ayer, al igual que el Registro Civil que estuvo 72 horas fuera de juego, lo que obligó a volver a anotaciones analógicas para que pudieran llevarse a cabo los entierros de personas fallecidas. No obstante, los pasillos de las salas de vistas seguían presentando menor presencia de público de la habitual.
Normalidad absoluta tras el Primero de Mayo
It is trusting that this Friday, after the holiday of this May firstfull activity returns to the courts. The lawyers, attorneys and social graduates They began to breathe this Wednesday relieved to communicate and receive telematic communications to be noritique sentences and resolutions of all kinds, access to PROCEDURES DOCUMENTATION that carry and communications related to demands and complaints.
The prolongation of the effects of the blackout kept them in embers from the same day April 28 when Spain remained in the dark. The processing of hundreds of judicial matters has been blocked for three days to despair of these professionals and their clients.
Ricobayo y Aldeadávila, claves contra el apagón
Las centrales hidroeléctricas de Aldeadávila, en el Duero, con una potencia de 1.242 megavatios y Ricobayo, con 328, en el Esla, ambas de Iberdrola, han sido piezas clave en la reactivación del impulso eléctrico, señaló el profesor Jesús Sagredo, doctor en Sistemas Eléctricos de Potencia, debido a su capacidad para ponerse en marcha y funcionar desde cero y sin ningún tipo de apoyo externo.
El resto de centrales térmicas, de gas, solares o eólicas necesitan energía para arrancar. Tras el apagón general estas centrales crean islas de luz que Re Eléctrica conecta a sus líneas y distribuye para avanzar en la recuperación del sistema, de ahí que Salamanca y Zamora fueran las primeras en tener electricidad. «Arrancamos gracias a la hidráulicas y a que en la cuenca del Duero tenemos tres ríos (Duero, Esla y Tera) que estaban a tope» explicó Sagredo.
El apagón pasó, pero no sus consecuencias, que todavía siguen trayendo cola. Los trenes recuperaron la normalidad, ya con menos retrasos, y el hospital las intervenciones suspendidas (la Junta dijo una inicialmente y luego actualizó la cifra hasta 10). No llegó ningún bebé al mundo en las horas que duró el corte de suministro.
Las administraciones, como la Junta, Hacienda o Diputación están alargando los plazos para quienes no pudieran llegar a tiempo para «presentar los papeles» (una forma de hablar, porque casi todo se hace por Internet) en todo tipo de actos administrativos. Muchos supermercados han tenido que tirar género por el apagón.
Subscribe to continue reading
Related news :