La Policía Nacional busca a dos individuos que huyeron tras dar una paliza a un vecino de Vigo de 45 años al que sorprendieron cuando entraba con su pareja en la vivienda donde residen en Beade. A la mujer la arrastraron y, aunque en su caso no sufrió lesiones de gravedad, también fue trasladada al Hospital Álvaro Cunqueiro.
Ocurrió poco antes de las 15.30 horas de ayer en un chalé ubicado en la rúa Seixo, cerca de un centro de día. Según los primeros datos recabados, la pareja fue atacada nada más entrar en la propiedad, donde viven de alquiler. Los individuos, que ocultaban sus rostros con un pasamontañas y un casco respectivamente, estaban agazapados en el jardín, entre el muro exterior y la fachada de la propia casa. Cuando las víctimas abrieron el portal, se abalanzaron sobre el hombre, mientras que a la mujer la habrían inmovilizado y arrastrado por el suelo.
La peor parte se la llevo el varón, al que le habrían aplicado la conocida como maniobra del mataleón, una peligrosa técnica de artes marciales en la que se hace palanca con los dos brazos alrededor del cuello de la víctima buscando su inmovilización o pérdida de conciencia, lo que no lograron en este caso porque la víctima se resistió con fuerza, si bien presentaba aparatosas lesiones por golpes en su rostro. «Tenía la cara ensangrentada», describen unos vecinos que salieron a la calle alarmados por la presencia policial una vez se dio la alerta de los hechos.
-Al punto, junto al 061, acudieron la Policía Local y la Policía Nacional. Este último cuerpo policial se hizo cargo del caso y, tras personarse en primera instancia Seguridad Ciudadana, al lugar se trasladaron las brigadas de Policía Judicial y de Científica. Los individuos robaron el bolso de la mujer –con documentación personal y dinero– y unas llaves de la casa, si bien en la investigación se trabaja con varias hipótesis sobre la causa de los hechos. Los atacantes, según testigos, eran altos, morenos, de piel y ropa oscura y aparentemente extranjeros. Huyeron, tras hacer un cambio de sentido, en un coche blanco o grisáceo claro que habían aparcado en las inmediaciones.
«Salí a la ventana y vi que tenían al vecino como ahorcado»
Una vez fuera, vio como dos varones abrían el «portal» y salían «corriendo». «En ese momento tuve miedo por si me hacían algo a mí», confiesa. Los individuos, describe, eran «altos y morenos» y «no parecían españoles». «Se fueron en un coche que estaba aparcado un poco más arriba», relata. Sobre el vecino al que agredieron, indica, tenía «la cara y los ojos golpeados». «Decía que habían entrado en su vivienda y se habían llevado el bolso de su esposa», concluye.
Un vecino que estaba cocinando en su casa escuchó gritos «de repente». Como «no cesaban», se alarmó y decidió salir a ver qué ocurría. Desde la ventana de su baño vio como un individuo tenía «como ahorcado» al morador de la vivienda situada junto a la suya. «Pensé que lo estaban matando y, sin dudarlo y por humanidad, grité para que dejaran de golpearlo y salí corriendo a la calle», cuenta este testigo.
